La tripulación de la Estación Espacial Internacional, brindaron y bebieron en el espacio, por primera vez agua reciclada a partir de su propia orina, sudor y condensación de aire exhalado.
De esta forma se llega a cumplir una nueva meta en la historia espacial, dado está tecnología de purificación, permitirá reducir considerablemente la cantidad de agua necesaria que hay que llevar a la Estación Espacial Internacional, para los viajes espaciales, de modo que las excursiones al satélite natural de nuestro planeta, dejaron de ser la última frontera en el espacio.
La tecnología utilizada, es al momento, revolucionaria y muy parecida a la que sirvió para reciclar el agua, tras los desastres de los tsunamis en 2004, aunque está era mucho más lenta, ahora se pueden conseguir unos 23 litros en seis horas.
El agua purificada se consigue, tras pasar por unos sistemas de membranas filtrantes los vapores del sudor, aire exhalado y orina, consiguiendo así desodorizarla, desaborizarla y eliminar los contaminantes, etc.
Claro está que la idea de beber tu orina, aunque sea reciclada, no es la más agradable, pero por otra parte es seguro de que sus características y niveles de higiene, se encuentran al nivel de cualquier agua potable.