La empresa constructora de automóviles alemana, Volkswagen, pone en marcha una copa monomarca basada en el Scirocco GT, un nuevo prototipo y orgullo de la marca, un auto propulsado por gas natural comprimido: coches de carreras con 270 caballos que reducen en un 80% las emisiones de CO2.
Lo ingenioso y espectacular del modelo, es que el Scirocco GT propulsado por gas natural, podía hacer frente a las exigencias mecánicas de la competición, demostrando alta fiabilidad y rendimiento al vencer la carrera en su categoría.
Ahora la marca quiere extender esa experiencia con una copa monomarca que empleará nuevas unidades idénticas entre sí desarrolladas con la experiencia de los coches empleados en Nurburgring.
Bajo la carrocería del Scirocco se esconde un motor TFSI 2.0 litros turbo capaz de 270 caballos y alimentado por gas natural (CNG) comprimido; combustible que permite una reducción de las emisiones en torno a un 80% con respecto a un motor similar alimentado por gasolina. Este propulsor irá unido a una caja DSG de seis velocidades que se manejará mediante levas colocadas tras el volante y dispondrá de tracción delantera.
La nueva copa sustituye en el calendario alemán a la Polo Cup, que tras ocho años de convocatoria cede su lugar a este nuevo concepto, en el que además del “gancho” ecológico contará con el aliciente de la participación ocasional de los pilotos oficiales vinculados a la marca, como Hans-Joachim Stuck, el propio Carlos Sainz y otros todavía no confirmados y procedentes de competiciones de todo tipo.
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