En una provincia de Argentina, personas de diferentes credos se manifestaron en contra del proyecto de ley que aspira reformar el Código Civil de la Nación, con el fin de permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Una multitudinaria protesta, que se encontro presidida por el Obispo de Catamarca, Luis Urbanc, marchó desde el Paseo La Alameda, hasta la Plazoleta de La Bandera, en la plaza 25 de Mayo, frente a la Casa de Gobierno argentina. La convocatoria fue impulsada por una de las ONG argentinas, llamada «SOS Familias» y contó con la participación de personas de las más diversas religiones, desde iglesias protestantes, evangélicas, adventistas, y católica.
No sólo hubo presencia de personas religiosas, sino que también participaron funcionarios de la Justicia Federal, legisladores provinciales y nacionales, entre muchos otros.
Uno de los obispos presentes, el obispo Urbanc, exclamó que era partícipe de la marcha «…como un ciudadano más, para pedir por la familia…»; y señaló que «..hay que acompañar y rezar…» por los grupos que representan a homosexuales, tanto gays como lesbianas, que reclaman el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Por su parte, representantes de los grupos de homosexuales y de la diversidad, presenciaron la marcha en contra de su lucha y manifestaron su desagrado por las consignas que allí se promulgaron.