Las máquinas automáticas se han reinventado. De ellas ya no solo podrá obtener un paquete de papitas, galletas o gaseosas, sino productos más complejos como pizzas o caviar.
Pŕactica y rápidamente, solo insertando monedas (o billetes) y apretando un botón se puede aprovechar de productos nuevos e insólitos. La página web Slash Food ha hecho una lista, detallando las características de estas máquinas:
Pizza Automática: La marca de máquinas «Let’s Pizza» ofrece, en Italia, cuatro tipos diferentes de pizza, preparadas desde cero. Es decir que la máquina expendedora mezcla la masa, pone la salsa, el queso y el resto de los ingredientes en el momento. Luego, hornea la pizza en menos de tres minutos. Su consumo se ha vuelto muy popular en centros comerciales y aeropuertos.
Papas australianas: Si desea degustar unas ricas e instantáneas papas fritas, solo debe acercarse a una expendedora de la empresa “Hot Fresh Fries” y las obtendrá de inmediato.
Pesque su propia langosta: En diversos restaurantes y supermercados alrededor del mundo, usted podrá encontrar máquinas automáticas con esta opción. Tienen la misma estructura y funcionamiento que las máquinas en las que los niños pueden retirar peluches con unas pinzas.
Huevos al instante: En California y en ciudades de Japón, se pueden conseguir huevos frescos en este tipo de máquinas.
Identificación Express: En República Checa, usted puede comprar DNI (o su pasaporte) que será escaneado para comprobar si usted es mayor de edad y puede comprar alcohol de forma legal.
Menú específico: Como en Estados Unidos la comunidad judía es muy importante, se ha creado una máquina de comida 
kosher, que cumple con los preceptos bíblicos del Levítico 11. En este pasaje, Jehová le habla a Moisés y le dice cuáles son los alimentos (y las combinaciones de comida) puros e impuros.
La empresa Hot Nosh 24/6 puede crear platos kosher calientes en 90 segundos, como palitos de mozzarella, pizza de queso, aritos de ajo y vegetales.
Refinamiento absoluto: Expendedoras de caviar son usadas en Rusia. Una empresa ha instalado 33 máquinas en Moscú llenas de envases de vidrio y latas de caviar rojo, la variedad más barata.