Es habitual en el mundo de la informática el desarrollo de hardware de alto rendimiento destinado pura y exclusivamente al uso profesional o «industrial»; tal es el caso de las nuevas memorias RAM Kingston HyperX Black T1.
Muchos de nosotros posiblemente jamás veamos una en funcionamiento, ya que nadie las va a necesitar para uso personal. Se tratan de memorias RAM DDR3 que alcanzan una frecuencia de 1.600 MHz sin riesgo alguno. Para ello las Kingston HyperX Black T1 incorporan disipadores de aluminio que le permiten un overclock importante haciéndolas trabajar al borde del abismo sin ningún tipo de inconvenientes.
Las mismas se comercializan en pack de 3 y 6 módulos y su coste es realmente elevado. El pack de 3 módulos con un total de 6 GB está para 75 euros, los 12 GB para 137 euros y los 24 GB a 273 euros.