Los Reyes presidieron el homenaje a las víctimas del terrorismo

Cada día 27 de junio, comenzando la cuenta este año, se celebrará una sesión solemne, llevada a cabo en el Congreso de los Diputados, en memoria a todas las víctimas de terrorismo.

El rey Don Juan Carlos y doña Sofía han encabezado el acto  en conmemoración de las que fueron víctimas de terrorismo, recordando especialmente, el atentado que se produjo en España, el día 11 de marzo, hace seis años, además del atentado terrorista de ETA, que se produjo en el año 1960.

Como todos los años anteriores desde 2004 se realizó una sesión plenaria, en la que se acordó por consenso, que el pasado 27 de junio se declararía Día de Homenaje a las Víctimas del Terrorismo, llevándose a cabo ese homenaje desde 2010 en adelante.

Está aún presente en la memoria colectiva española, aquel día 27 de junio de 1960, cuando la organización terrorista ETA asesinó a su primera víctima, una niña de apenas 22 meses, llamada Begoña Urroz Ibarrola. En honor a ella, que representa a todas las posteriores víctimas de atentados terroristas, se crea esta fecha de conmemoración, que cala hondo en la cultura y memoria española.

Los presidentes del Congreso, José Bono, y Senado, Javier Rojo, la Vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, la Presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, y el Presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, fueron quienes dieron la bienvenida a los asistentes al homenaje, que la Cámara de Diputados celebró en honor a las víctimas del terrorismo.

El rey ofreció un discurso a los presentes, en el Salón de Plenos del Congreso, donde aseguró que  «…nos debemos a las víctimas, y nos debemos igualmente a sus familias…»; además de que tomó apunte de la lucha en contra del terrorismo, sobre la que señaló que «..es una de las demandas más unánimes de la sociedad española, una obligación de todos los demócratas y un deber frente a las víctimas y sus familias…».

Algunas de las palabras más conmovedoras y emocionantes del discurso fueron las que se dirigieron a la reina y a su familia, incluyéndoles  en ese cálido abrazo a los familiares de las víctimas mortales, que fueron sometidas al espanto terrorista.

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