Protestas en Cannes

En el Festival de cine de Cannes se ha desatado una protesta, debido a la presentación de una película que trata de la Independencia de Argelia, llamada «Hors la Loi» («Fuera de la Ley»). Su realizador es Rachid Bouchareb, de origen franco-argelino, y su propuesta era dar un fresco sobre un hecho puntual de la Historia de Argelia, pero desencadenó manifestaciones en la ciudad anfitriona del Festival.

Bouchareb demostró cierta sorpresa a las protestas movilizadas por su film, que retoma el pasado colonial de Francia pero que se enfoca, más que nada, en la saga de tres hermanos nacidos en Argelia, y que luego, en París, se ven envueltos y participan en la lucha por la independencia de su país.
«…Mi película no es un campo de batalla…», señaló el director, mientras unas 1.200 personas, según  datos de la Policía francesa, se manifestaban en las calles del lujoso balneario de la Riviera francesa y los policías antidisturbios impedían que se acercasen al Palacio de Festivales, rodeado por vallas de seguridad.

La movilización fue impulsada por partidarios del Frente Nacional, que pertenece a la corriente política de extrema derecha, así como también por organizaciones de ex combatientes y «harkis» (argelinos que lucharon del lado francés durante la batalla retratada en el film). Los manifestantes fueron convocados frente al monumento a los muertos de Cannes, para «rendir homenaje a las víctimas francesas» en la guerra de Argelia.

La protesta tuvo algunos adeptos, que a pesar que no se concentraron en el lugar de encuentro, testimoniaron en contra de lo que se muestra en la película. Uno de ellos, Frederic Bruno (ex combatiente de 62 años), afirma que la creación de Bouchareb «…es una falsificación de la historia…». Aseguró que el ejército francés en Setif «mantuvo el orden», después de que los argelinos mataron a franceses.

Por su parte, el realizador del film testificó: «…Yo no soy un documentalista. Mis protagonistas son argelinos. Y cuento la historia desde el punto de vista de los argelinos». «Sé que el pasado colonial francés reabre heridas. Pero este pasado debe ser debatido para avanzar hacia un verdadero encuentro (entre Argelia y Francia), para avanzar a cosas positivas…».

 

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