La compañía tecnológica estadounidense, Apple, ha decidido poner patente a algunas de las herramientas de sus diferentes dispositivos, tales como teléfonos móviles y ‘tablets’, en pos de contraponerse al fenómeno denominado «jailbreaking», entre otras formas de «hackeo» o modificación, para poder deshabilitarlos.
Hace no mucho tiempo, el Gobierno de Estados Unidos ha considerado el «jailbreak» como una práctica legal, en relación a la instalación de aplicaciones no autorizadas por Apple, por ejemplo. Estas disposiciones han sido incorporadas a las nuevas excepciones de la Ley de los Derechos de Autor.
En estos momentos, la empresa Apple espera que su solicitud de patente, la cual había sido presentada en el mes de febrero del pasado año, impida que ese tipo de prácticas se lleve a cabo.
Como principal punto dentro de esta solicitud, se encuentra el apartado titulado «Sistemas y Métodos para la identificación de usuarios no autorizados de un dispositivo electrónico», que propone un conjunto de medidas para la detección e identificación de aparatos robados, además de garantizar la protección de la información almacenada dentro del operador.
Agunas otras medidas de precaución que Apple impulsa y que la solicitud explicita, se centran en la monitorización de la cantidad de tráfico recibido, la activación de la cámara o del micrófono, que permite identificar a quien esté utilizando el dispositivo en ese momento, la detección de usos del acelerómetro fuera de un patrón, la activación del GPS, entre otros tantos recaudos que la compañía ha propuesto, y por los cuales espera autorización.
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