En 1990, el ídolo de Camerún marcó un antes y un después en las celebraciones de los goles
El 23 de junio de 1990, en el estadio San Paolo de Italia, Roger Milla entró a la historia del fútbol. Esa tarde, en el choque ante el poderoso seleccionado colombiano encabezado por el ‘Pibe’ Valderrama y secundado por René Higuita, Milla marcó los dos goles para darle el triunfo (2-1) a Camerún.
Lo anecdótico del partido no solo fue el triunfo del conjunto africano ante un equipo sudamericano que se había convertido en firme candidato al título, lo que realmente llamó la atención de todo el mundo es cómo el ídolo camerunés celebró ambos goles.
Sus festejos no fueron gritos desaforados, tampoco saltos, ni carreras desenfrenadas sin rumbo fijo; él prefirió bailar frente a los banderines del córner. Lo hizo en el primer tanto, luego de vencer con un potente remate alto el arco colombiano, y lo hizo en el segundo cuando le robó la pelota a un confiado René Higuita.
La danza del maestro Roger Milla se sigue usando hasta hoy para darle vida y alegría a los spots publicitarios de la Copa del Mundo. Esta vez, Coca-Cola revive ese momento de cara al Mundial de Sudáfrica 2010.
El reciente comercial de la gaseosa patrocinadora oficial del torneo, se inspira en el legendario héroe de la Copa del Mundo FIFA 1990 quien, con su danza inmortal, fue el gran responsable de cambiar las celebraciones de los goles para siempre.