Mientras la llegada del hombre a la Luna, hace 41 años exactamente, el 20 de julio de 1969, se convertía en realidad, en la NASA se realizaba la grabación de cómo se vivía ese momento en la central de control de Houston.
Las secuencias visuales se han visto a lo largo de estos años, alrededor de todo el mundo e innumerables veces. A pesar de ello, las imágenes de la llegada de Neil Armstrong y de Edwin Aldrin al único satélite natural de la Tierra, carecían, hasta la actualidad, de sincronización con los sonidos, debido a que nunca se grabaron en conjunto.
Es por eso que el cineasta británico Stephen Slater, gran aficionado del Apolo 11, con la colaboración de la productora de cine Footagevault, de Londres, han cotejado el material, muy cuidadosamente, haciendo coincidir en tiempo y forma, las imágenes que se obtuvieron durante la llegada, con las reacciones, registradas a través del audio, de la misión que cambió la historia de la humanidad.
Los antecedentes de este trabajo, por parte de Footagevault, datan del 2006, a través de la sincronización de algunos fotogramas. Ahora, con la participación de Slater en el proyecto, se han podido sincronizar más de ocho minutos del alunizaje
de Apolo 11.
«…Algunas de estas secuencias se han convertido en todo un icono, tanto como el despegue del Saturn V o el amanecer de la Tierra desde la Luna…», señala el cineasta.
Slater además manifestó que a pesar de aquellos intentos precedentes de la sincronización, «…estaba decepcionado con el trato que se le había dado a los fotogramas desde la sala de control, sin apreciarse que era el momento real del alunizaje del ‘Eagle’…».
El británico empleó el conocido ‘tiempo transcurrido en tierra’, para mostrar los fotogramas que enfocaban al reloj, como forma de dar continuidad a lo que estaba grabando. Las imágenes fuero filmadas a partir de dos cámaras dispuestas en la sala de control, además de una que poseía vista aérea.
«…Por desgracia, lo que más evidencia este trabajo de sincronización es cuántos momentos importantes de la misión no se llegaron a grabar…», lamenta irremediablemente Slater.
Algunos momentos que forman parte de nuestra historia como humanos, será profundizada a través de esta producción, que esperamos pueda revelar más detalles de el momento en el que se dio «…un pequeño paso para el hombre, pero un gran paso para la humanidad…».
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