En el día de hoy Microsoft ha llevado a cabo la presentación de su nueva consola, la cual entra de lleno en la nueva generación de consolas junto con Nintendo Wii U y la recientemente presentada PlayStation 4. En la presentación la verdad es que no han dado demasiados detalles que esperábamos conocer, aunque sí que hemos podido ver por completo la consola y algunas pequeñas muestras de lo que es capaz de hacer, sin dedicar demasiado tiempo a los videojuegos que estarán acompañándola, como los supuestos 15 videojuegos exclusivos que han prometido.
La consola recibe el nombre de Xbox One y el diseño presenta unas líneas muy rectas y minimalistas, para que encaje perfectamente en nuestro salón, el cual cada vez más se enfoca a televisiones grandes con poco marco y espacios reducidos. Internamente cuenta con un procesador de arquitectura 64 bits que funciona a 1,6 Ghz y el caché es de 4 Mb. La GPU es de 800 Mhz y cuenta con soporte para DirectX 11. La potencia gráfica según comentan desde la compañía, es ocho veces superior de la actual Xbox 360. La memoria interna es DDR3 de 8 Gb. En la presentación se ha hecho mucho hincapié en la conectividad con otros usuarios y con otros dispositivos, haciendo de la consola más un centro multimedia que otra cosa.