El mundo de las pantallas táctil puede vivir una nueva revolución gracias a la tecnología HaptoMime, desarrollada por un equipo de la Universidad de Tokio. Los investigadores han conseguido elaborar un sistema que recrea el contacto físico. Es decir, sentimos que estamos tocando una pantalla, pero realmente no lo estamos haciendo sino que se trata de un holograma. Se trata de una pantalla virtual que podemos tocar y sentir, desarrollada a través de un holograma que emplea superficies reflectantes.
Según ha explicado el portal New Scientist, la pantalla holográfrica, que ha sido bautizada como HaptoMime, cuenta con sensores infrarrojos que detectan cuando una persona trata de tocarla. Una vez detectado el usuario, el sistema le envía unas vibraciones ultrasónicas hacia los dedos, recreando la sensación de contacto físico. Estos ultrasonidos simulan el contacto de los dedos con la pantalla virtual.
El sistema permite graduar también la intensidad del contacto. Las sensaciones abarcan desde el tacto de una ligera brisa hasta la impresión de que se está apoyando los dedos sobre una superficie completamente rígida. «Es como tocar un teclado de juguete. Solo tienes que estirar la mano hacia la imagen flotante», explica Yasuaki Monnai, uno de los responsables del proyecto. Los dedos tan solo acarician el aire, pero la sensación es de contacto pleno.
Los creadores de la tecnología HaptoMime considera que ésta tendría aplicaciones futuras en cajeros automáticos, puesto que permitiría introducir el número secreto de la tarjeta de crédito de forma más segura y sin dejar marcar en el teclado. También se estudia su aplicación en el control de interfaces en entornos donde tocar de forma física resulta imposible, como un quirófano.
Hasta el momento no se conocen más aplicaciones de esta tecnología que todavía se encuentra en fase experimental, pero que continuará desarrollándose para que pueda ser empleada con normalidad en un futuro no muy lejano.